Mallorca es un destino reconocido por sus playas de arena dorada, pero, también alberga una gran riqueza natural protegida. La isla cuenta con varios parques naturales que destacan por su biodiversidad, con paisajes mágicos y una gran importancia ecológica. En este contexto, ya sean humedales llenos de aves migratorias, bosques mediterráneos verdes o reservas marinas llenas de vida submarina, estos espacios ofrecen una oportunidad única para conectar con la naturaleza.
Cada parque tiene su propia identidad y características que lo hacen especial. Algunos, como la Albufera de Mallorca y Es Trenc-Salobrar de Campos, son refugios de aves y ecosistemas húmedos esenciales para la conservación de la biodiversidad. Otros, como la península de Llevant y Mondragó, combinan montañas, bosques y playas en entornos perfectos para el senderismo y la observación de la fauna local. A continuación, presentamos los principales parques naturales de la isla de Mallorca, lugares destacados para los amantes de la naturaleza y el turismo sostenible.
Parque Natural de la Albufera de Mallorca

El Parque Natural de la Albufera de Mallorca es el humedal más extenso de la isla, estando ubicado en la bahía de Alcudia. Este parque, que cuenta con más de 1.600 hectáreas de marismas, canales y dunas, es un refugio esencial para aves migratorias y una de las áreas de mayor biodiversidad en Mallorca.
El parque alberga más de 300 especies de aves, como flamencos, garzas y águilas pescadoras, convirtiéndolo en un paraíso para la observación de aves. También cuenta con una gran diversidad de flora y fauna autóctona, con especies como la tortuga de agua y diversas variedades de peces y anfibios. La combinación de lagunas, marismas y vegetación mediterránea crea este ecosistema único en la isla. Para los visitantes, el parque dispone de rutas accesibles, con miradores estratégicamente ubicados para disfrutar del paisaje y la fauna.
Parque Natural de Mondragó

El Parque Natural de Mondragó, situado en el sureste de la isla, cerca de Santanyí, es uno de los espacios naturales más visitados de Mallorca. Este lugar se caracteriza por su diversidad de paisajes, que incluyen calas de aguas cristalinas, dunas de arena, acantilados y amplios bosques de pinos y acebuches.
Dos de sus playas más conocidas, Cala Mondragó y S’Amarador, perfectas para disfrutar del mar en un entorno virgen y protegido. Sus aguas turquesas y su arena blanca las convierten en un paraíso natural, alejado de las grandes urbanizaciones turísticas. La riqueza del ecosistema marino también lo hace perfecto para el buceo y el snorkel. El parque cuenta con varias rutas de senderismo, aptas para todos los niveles, recorriendo el bosque mediterráneo y descubriendo antiguos refugios de pastores.
Parque Natural de la Península de Llevant
El Parque Natural de la Península de Llevant, ubicado en el noreste de Mallorca, es un territorio de gran valor ecológico y paisajístico. Sus montañas, valles y costas lo convierten en un lugar perfecto para los amantes del senderismo y la naturaleza en estado puro. Este parque cuenta con una extensa red de rutas de senderismo que atraviesan colinas y montañas con vistas panorámicas al Mediterráneo.
Una de las más populares es la subida a Sa Talaia Freda, el punto más alto del parque, desde donde se pueden contemplar espectaculares paisajes de la costa y el interior de Mallorca. Durante el recorrido, es común avistar aves rapaces como el halcón peregrino y el águila calzada. Además de su riqueza natural, la Península de Llevant alberga antiguas posesiones y construcciones de piedra que reflejan la historia agrícola de la zona.
Archipiélago de Cabrera

El Parque Nacional marítimo-terrestre del archipiélago de Cabrera es una de las áreas protegidas más importantes de España y el mejor ejemplo de ecosistema mediterráneo en su estado más puro. Este conjunto de islas y aguas alberga una biodiversidad única, tanto terrestre como marina. Además, el acceso a Cabrera se realiza en barco desde Colònia de Sant Jordi, lo que añade un toque de aventura a la visita.
Una vez en la isla, los visitantes pueden hacer diferentes rutas, como la que lleva al castillo de Cabrera, una fortaleza del siglo XIV con impresionantes vistas panorámicas del horizonte. También es posible recorrer la Cova Blava, una cueva marina donde la luz del sol crea un espectacular efecto de color azul intenso. Bajo sus aguas, Cabrera alberga uno de los ecosistemas marinos mejor conservados del Mediterráneo. Sus fondos marinos son perfectos para el buceo y el snorkel, con la posibilidad de ver especies como meros, delfines y tortugas.
Isla Dragonera

A pesar de su tamaño, la isla Dragonera, situada frente a la costa oeste de Mallorca, es una reserva natural de gran valor ecológico. Su nombre proviene de su peculiar forma de dragón y de la presencia de una especie de lagartija endémica que habita la isla.
La mejor manera de llegar a Dragonera es en barco desde Sant Elm o Port d’Andratx. Una vez en la isla, los visitantes pueden recorrer sus senderos, que llevan a lugares como el faro de Tramuntana y el faro de Llebeig, ofreciendo vistas del mar y la costa mallorquina. Además de su fauna terrestre, la isla es un importante refugio de aves marinas como la pardela balear.
Parque Natural de Es Trenc-Salobrar de Campos

El Parque Natural de Es Trenc-Salobrar de Campos es uno de los espacios naturales más importantes del sur de Mallorca. Su combinación de playas de arena blanca, dunas y salinas crea un ecosistema de gran belleza. La playa de Es Trenc, con sus aguas cristalinas y su arena fina, es considerada una de las más paradisíacas de Mallorca.
Además, sus alrededores albergan lugares como el Salobrar de Campos, una zona húmeda donde se pueden observar flamencos y otras aves migratorias. El parque es un destino perfecto para quienes buscan combinar naturaleza y relax. Sus paisajes, su biodiversidad y su importancia ecológica lo convierten en un lugar imprescindible para conocer el lado más salvaje y protegido de Mallorca.